Recientemente llegó a Mar del Plata parte de la colección de ex libris de la Biblioteca Nacional, que además posee la colección más grande de América Latina. Esta muestra itinerante denominada “Ex libris. La heráldica en los libros” trae a la ciudad ejemplares que pertenecieron a grandes figuras de la literatura nacional, así como obras y grabados realizados por reconocidos artistas.
¿Qué son los ex libris? ¿Cuándo y por qué nacieron, cuál es su importancia? En esta nota te contamos sobre estos ejemplares especiales, en donde se mezclan literatura y arte.
Ex libris: su origen y evolución
Esta alocución latina significa “de entre los libros de” o “de los libros de”. “Los ex libris son la marca de propiedad de un libro, indican a quién pertenece. Ya en los códices del Antiguo Egipto se encontraron los primeros, que se escribían en letra manuscrita”, explica Marcelo Di Luciano, librero anticuario y propietario de la librería El Ventanal.
Otro momento importante para su auge y desarrollo es la Edad Media. Con el nacimiento de la imprenta y el grabado, comenzaron a diseñarse en rectángulos donde el propietario mandaba a imprimir un texto. De esta época son los ex libris que exhiben heráldicas, castillos, escudos de familias o de la nobleza. Más adelante en el tiempo, estas imágenes se diversifican: comienzan a aparecer alegorías, símbolos, elementos de la masonería y del erotismo, entre otros.
Finalmente, surgen los sellos como variantes de las etiquetas que indican la propiedad del libro, estampando el nombre de una persona, de una biblioteca o de un club. Marcelo cuenta que en su librería tienen varios ejemplares con el sello de propiedad de la famosa tienda Harrods impreso, así como una interesante colección que han formado durante décadas de dedicarse a la compra y venta de libros antiguos.
Algunas pautas para realizar una marca de propiedad
La Federación Internacional de Amigos de los Ex Libris (Fisae) posee una serie de pautas para realizar la marca de propiedad. Algunas de ellas son:
– El lado mayor de la imagen debe de medir como máximo 13 centrímetros.
– Debe estar presente la palabra “ex libris”, en latín o en otro idioma.
– Debe figurar el nombre del propietario o sus iniciales, bien sea a una persona viva o una institución.
– El símbolo o emblema debe tener relación con el propietario.
Con respecto a las técnicas para realizarla, como contábamos, esta han evolucionado con el tiempo. Con la incorporación de la xilografía, calcografía y litografía, los ex libris cobraron notoriedad y valor dentro del ámbito artístico, ya que se los puede considerar como un género artístico en sí mismo con reconocidos exponentes.
En la actualidad y gracias a las posibilidad que brinda la tecnología, también se emplean la gráfica digital y la fotografía para crearlos.
Sobre la muestra “Ex libris. La heráldica en los libros”
La colección de la Biblioteca Nacional está conformada por más de 26.000 ejemplares donados por María Magdalena Otamendi, fundadora de la Asociación Argentina de Ex Libris. Se trata del acervo más numeroso de América Latina; algunas de esas piezas conforman la muestra itinerante que visitó varias ciudades del país y llegó a Mar del Plata.
En esta oportunidad se podrán ver ejemplares que pertenecieron a grandes escritores argentinos como Victoria Ocampo, Ricardo Guiraldes y Manuel Mujica Láinez. Pero además, la muestra contiene obras de artistas grabadores de todo el mundo.
La muestra se exhibe en el Museo Juan Carlos Castagnino y puede visitarse de miércoles a lunes entre las 14 y las 18 horas, con entrada gratuita.
En el marco de la muestra habrá charlas de interés sobre la temática. Por su parte, la Biblioteca Central de la Universidad Nacional de Mar del Plata inauguró la muestra “Impresiones del pasado. Marcas de procedencia”, donde comparte con el público su propia colección de ex libris. La misma puede visitarse hasta el 23 de octubre de 8 a 20 horas en la sede de Rodriguez Peña 4046.
En opinión de Marcelo Di Luciano, los ex libris así como las estampillas y otros elementos coleccionables tenderán a desaparecer; simplemente se perderá el interés y quedarán como reliquias antiguas. Hasta que eso pase, tenemos la suerte de poder verlos y disfrutarlos a través de distintas iniciativas en nuestra ciudad.
Autor foto de portada: Marcelo Di Luciano – librería El Ventanal
Muy interesante